CUIDADOS Y CONSEJOS SOBRE EL CUIDADO DE LOS COLLARES
Hola! No queríamos dejar de contarte sobre los cuidados, consejos y propiedades de las piedras y perlas cultivadas con las cuales trabajamos. Por ello les venimos a contar algunas consideraciones sobre las piedras naturales que utilizamos en la elaboración de nuestras piezas y que pueden encontrar en nuestra web. Son varias las cuestiones a tener en cuenta a la hora de elegir un cristal, limpiarlo, usarlo y darle los cuidados que necesite. A continuación te contamos sobre los cristales en general, y luego características particulares y propiedades de cada uno.
CÓMO CUIDAR LAS PERLAS
Las perlas cultivadas son relativamente suaves en comparación con otras gemas y metales preciosos. Es importante tener un cuidado especial para asegurar que permanecen brillantes y bonitas durante años.
Las perlas son porosas, por lo que los cosméticos, los perfumes y el spray para el cabello pueden deteriorarlas poco a poco.
Por lo tanto, lo mejor sería ponerse las perlas después de aplicar el maquillaje, el perfume y el spray para el cabello. Una buena norma para el cuidado de las perlas, es que sean lo último que te pones y lo primero que te quitas.
También es buena idea que limpies tus perlas con un paño suave después de usarlas y, de vez en cuando, puedes humedecerlo con agua y hacer una limpieza más completa. Evita el uso de jabones abrasivos ya que pueden dañar el brillo de las perlas.
Usa tus perlas a menudo, las perlas absorben los aceites naturales de la piel y esto las mantiene hidratadas y brillantes, no obstante, intenta no usarlas mientras haces deporte, ya que el sudor es ácido y puede deteriorar su brillo con el tiempo.
Mantén siempre tus perlas separadas de otras joyas duras, como metales y otras piedras preciosas, para evitar que se rayen. Lo ideal es guardarlas en su caja, en una bolsa de tela o en un joyero por separado.
CUIDADO DE LOS CRISTALES:
Hay distintos tipos de piedras naturales, que poseen diferentes características físicas y por lo tanto conllevan distintos cuidados.
Muchos cristales son frágiles o friables (se desmenuzan fácilmente). Algunos son estratificados y pueden separarse o desintegrarse. Otros, como la Selenita, son solubles en agua. Algunas superficies pulidas, pueden rallarse con facilidad. Por lo tanto, es importante cuidar los cristales apropiadamente según sus características.
LIMPIEZA DE LOS CRISTALES:
Los cristales deben limpiarse cuando son comprados, después de haberlos llevado puestos por mucho tiempo, o de haberlos usado para sanar. Es importante limpiar los cristales que hayan estado en poder de otras personas, ya que pueden contener vibraciones negativas.
Los cristales que no son friables ni tienen junturas pueden dejarse debajo del agua corriente o sumergirse en el mar o agua salada. Mientras lo hacés, debés mantener la intención de que se lave toda la negatividad y de que el cristal se re energetice.
Algunos pueden recargarse a la luz del Sol o de la Luna durante algunas horas, siempre que se trate de cristales que no oscurezcan con la luz solar.
Los cristales que son friables pueden dejarse en sal marina o en sal de roca durante la noche. Posteriormente debe limpiarse con suavidad cada partícula de sal.
Los avaluón sirven muy bien en esta tarea.
También se pueden ahumar los cristales, o pasarlos por la luz de una vela.
